Noche química

Desde que fuimos liberados de nuestro encierro la realidad por la que pululamos se vuelve cada día más distópica.

Quizá os hayan llamado la atención esas colas de ancianos esperando para ser atendidos en el banco porque no saben utilizar la aplicación móvil o el cajero.

La verdad es que a algunos de ellos luego les ves manejando la máquina tragaperras del bar y flipas del «nivel experto» que manejan.

Dicen que la inteligencia artificial trata de ser lo más parecida posible a la inteligencia humana.Pues estamos perdidos.Yo conozco a uno que fregando un rayador de queso se quedó sin estropajo.

Por lo menos el oficio de humorista está a salvo porque es imposible que un robot tenga sentIdo del humor… ¿o si es posible?

Te lo cuento en mi «NOCHE QUIMICA», un espectáculo que trata de huir de la era de la digitalización y el transhumanismo a través de un viaje heroico al interior de ti mismo en el que, pasando por la edad media y otros lugares hilarantes, trataremos de convertir este mundo distópico en un lugar mejor, más amable y más humano, menos raro que decía la canción.

¡Un abrazo a todos! Enrique Loyola